LOS PUEBLOS INDÍGENAS, REFORMA
AGRARIA, CÓDIGO DE MINAS Y REFORMA A LA CARS.
![]() |
Armando Valbuena - Indígena Wayuu. Sabio Indigena de la Humanidad UNESCO/IIESALD 2009 Ex-presidente de la Organización Nacional Indígena de Colombia ONIC. |
Estamos en una década donde el
Pacto Internacional de los Derechos, Económicos, Sociales y Culturales,
-PIDESC- empiezan a ser desmontados en los países europeos ante la crisis vivida hoy por los ciudadanos Griegos, para
beneficiar a los grandes centros financieros colocando a los gobiernos bajo la
tutela de los bancos y las directrices de la Eurozona, con el visto bueno de
los gobiernos beneficiarios de los desordenes burocráticos del despilfarro,
corrupción y demás, sumado a ello la crisis del gobierno de los Estados Unidos,
quien paulatinamente pierde la guerra en Afganistán luego del caos creado en Irán,
con sus únicas guerras ganadas la de Panamá y Granada.
Para los Pueblos Indígenas, afro descendientes, campesinos y el pueblo
colombiano en general bajo la observación de la Corte Constitucional en su
sentencia T-025, los autos 004, 005, 251, 092 y demás entre ellos el auto
283 en su orden 18 obliga a incluir en los Planes de Desarrollo de las entidades
departamentales y municipales el cumplimiento para la superación del estado de
cosas Inconstitucionales (ECI) de tal manera se dé inicio al Goce Efectivo de
los Derechos de la victimas enunciadas en la ley de Victimas y Restitución de
tierras, el comportamiento gubernamental no es el ideal como lo demuestran las
acciones reales y concretas expresadas en la continuidad de los asesinatos
selectivos de quienes fueron despojados de sus bienes en las últimas
décadas demostradas en los hechos del primer semestre del año en
curso.
Ya empezamos a vivir lenta y
sistemáticamente los efectos de la Ley de control fiscal, cuando los recursos para el cumplimiento de las Ley
de víctimas y restitución de Tierras, empiezan a disminuir en el presupuesto
nacional con las lógicas consecuencias de su incumplimiento, seguimos los
caminos de la época de los tres siglos de la gobernabilidad castellana en donde
las leyes se hacen pero no se cumplen, son los efectos del gobierno actual apoyado
en su brazo político de la Unidad Nacional quien aprueba las leyes para su no
cumplimiento, y cumpliendo solo las que interesan a las empresas
multinacionales y sus bolsillos, dejando
la luz clara de la demagogia de los derechos humanos iniciada con las cuatro
piedras de los pueblos indígenas en la Sierra Nevada, y continuada en el Congreso
del Pueblo Indígena Embera, en el silencio de la solución del conflicto interno
en territorio Awa, Coreguaje, wayuu de las márgenes del rio ranchería, Nasa en
los municipios de Toribio, Corinto, Jámbalo, Silvia, kofanes y Sionas en la
construcción de carreteras sin consulta previa, paros armados en territorios
emberás, destrucción del hábitat Guahibo, Sálivas, iguanitos, o el proceso de
desestructuración cultural del Pueblo Indígena Nukak-Maku, para no mencionar
los afectados por el Coltan o la realidad en el Catatumbo.
El contenido del Pacto
Internacional de los Derechos Económicos, Sociales y Culturales –PIDESC- en su
preámbulo expresa:” Reconociendo que, con arreglo a la
Declaración Universal de Derechos Humanos, no puede realizarse el ideal del ser
humano libre, en el disfrute de las libertades civiles y políticas y liberado
del temor y de la miseria, a menos que se creen condiciones que permitan a cada
persona gozar de sus derechos civiles y políticos, tanto como de sus derechos
económicos, sociales y culturales,” es un enunciado del orden constitucional y
además hace parte del bloque de constitucionalidad, es un principio básico del
orden universal el cual no se llevado a cumplimiento y que hoy la Corte
Constitucional le recuerda al gobierno colombiano sus deberes para los
ciudadanos quien de manera irracional,
es burlado y mancillado por los miembros del senado y
cámara que hacen parte de la Unidad Nacional dirigido y ordenado desde el
Palacio de Nariño, es este un gobierno grosero y falaz, solo interesado en
sacar adelante sus locomotoras para lo cual consideran indispensable una
reforma agraria, minera y ambiental y así poder generar la continuidad del estado
para el solo usufructo de las familias gobernantes en
donde el 1% posee la propiedad de la tierra.
El Pacto Internacional de los
Derechos Económicos, Sociales y Culturales -PIDESC- en las últimas décadas no
se ha cumplido y hoy cuando la corte
ordena cumplirlos para con las victimas
entonces recorta el presupuesto para su no cumplimiento, es allí su grosería y
falacia, todo es sencilla demagogia, el gobierno griego quebró y asume el
endeudamiento de más de 100 millones dólares a beneficio de los grandes bancos sacrificando
los DESC de la ciudadanía, Colombia tiene una deuda externa superior a los 70
millones de dólares, el gobierno nada hace para superar esta deuda y sacrifica la
dignidad de los ciudadanos, el territorio y los bienes de los Pueblos
Indígenas, afros descendientes, y poco o nada hace para la restitución de las
tierras de los campesinos despojados, pero se prepara para las reformas de la
Ley agraria, minera y ambiental y poder garantizar el usufructo de las empresas
multinacionales con nuestros bienes de la biodiversidad, minera, agraria etc.
Se está resquebrajando el “estado
de Bienestar” europeo y la sentencia judicial de la Corte Constitucional en su
Auto 025 de enero del 2009, para superar el estado de cosas inconstitucionales
e iniciar el proceso del Goce Efectivo de los Derechos aun dista mucho para el cumplimiento de los DESC, bajo la
responsabilidad del actual gobierno, los Pueblos Indígenas quienes nos
encontramos en desplazamiento, riesgo de desplazamiento y en riesgo de extinción, y por lo tanto vulnerable entre
los más vulnerables, con grandes dificultades para el goce Efectivo de los
derechos Fundamentales, a pesar de ser
parte constitutiva de la fundamentación de las instituciones y que son los
condiciones para el ejercicio del poder las cosas no son nada agradables en el
marco de las cinco locomotoras del Plan Nacional de Desarrollo.
Los Pueblos Indígenas, quienes
pasamos de ser salvajes, semisalvajes y civilizados bajo la Tutela de la Ley 89
de 1890, fundamentada en ese entonces en el Uso y Goce de los Derechos Civiles
y Políticos, a gozar de la ciudadanía igual que todos los campesinos,
estudiantes, obreros etc., al constituirse el estado multiétnico y
pluricultural, entonces ahora los
derechos cada día se está menoscabando el Uso y Goce de los derechos sociales
muy a pesar de la existencia de mandatos judiciales para su cumplimiento, y eso
se realiza mediante actos legislativos como lo es la ley de control fiscal donde
se construye y perfecciona la inacción
del estado, recortando el presupuesto nacional y limitando de esta manera los
derechos a una vivienda digna, servicios públicos, tenencia de la tierra,
salud, educación, trabajo etc., retorno y restitución de tierras.
Los Pueblos Indígenas, quienes
solo llevamos dos décadas en el Uso, Goce de los Derechos Civiles y Políticos,
Derechos Económicos Sociales y Políticos, de la Declaración Universal de los
Derechos Humanos, de la Ley 21 de 1991 por lo menos en las normatividades,
ahora estamos bajo la sentencia judicial
de la corte constitucional quien ha considerado nuestra situación de victimas y
ha responsabilizado al Gobierno Nacional de ser victimario, nos vemos
afrontados a la Ley de control Fiscal, a
los planes de de desarrollo departamentales y municipales sin consulta previa y además al monstruo de
los cinco tentáculos que nos presionan para el proceso de consulta previa y la
cual se nos quiere aplicar en contra de los mandatos constitucionales,
normativos y jurisprudenciales para
favorecer el capital extranjero con el apoyo de las instituciones oficiales
quienes lideran estos procesos de manera particular el Ministerio de Minas y
Energía, del Ministerio de Agricultura y Ministerio del Medio ambiente bajo la
coordinación del Ministerio del Interior y de Justicia, quien ha creado la dirección
de Consulta previa, que para su accionar
lo realiza con recursos de las empresas
interesadas, y muchos casos con funcionarios contratados por el tiempo
necesario de determinados procesos.
Ante la gravedad de esta
situación es bueno recordar que las organizaciones CRIC, CRIT, CRIVA, CRIGUA,
etc., nacidas de la necesidad de defender derechos organizativos, políticos y
sociales de los Pueblos Indígenas dieron a luz la Organización Nacional
Indígena ONIC, mediante procesos de lucha, movilizaciones en el orden local, regional, nacional e internacional y
con ello sus resultados se fueron concretando en distintos acuerdos políticos,
resoluciones, decretos, decretos-leyes, leyes y la constitución nacional, y han
sido participes de jurisprudencias que han marcado nuevos rumbos mediante sub-reglas emitidas hasta el presente, entre
este proceso resaltamos la importancia de los cuarenta días y noches de 1996 en
la conferencia episcopal colombiana arrojando como resultado los decretos 1396 y
1397 en la conformación de la Mesa Permanente de Concertación, la Mesa Nacional
de Derechos Humanos y la Mesa Nacional de Territorios, y años después en
cumplimiento de sentencia judicial fue creada la Mesa de los Pueblos Indígenas
de la Amazonia.
Estos espacios vienen del proceso
de lucha en las carreteras, en el territorios, en los edificios públicos, llegándose a concretar en espacios de diálogo
y concertación con resultados regulares, jamás y nunca en la historia de los
Pueblos Indígenas los derechos fundamentales han sido reconocidos por el
Gobierno Nacional en voluntad política, siempre ha sido la constancia de los
procesos organizativos en medio de las luchas, en donde los asesinatos
colectivos, individuales, encarcelamientos, señalamientos y persecuciones,
despojos, falsedad de documentos de propiedad e intimidación colectiva no han
sido ajenos, este es el comportamiento en los dos siglos de gobernabilidad de
la Republica hoy bajo la bandera de las locomotoras.
Nuestro destino siempre ha sido
discutido de manera interna en los congresos de las organizaciones locales,
regionales, nacionales e internacionales con la presencia de los sectores
sociales a quienes hemos entendido mediante la escucha de sus realidades
agrarias, mineras y ambientales, nunca hemos estado desconectados de la
realidad social de los colombianos, de allí que hayamos participado en los
distintos procesos directa e indirectamente por encima de las diferencias
culturales, políticas o sociales.
Es necesario colocar en estos
momentos en todos los espacios de análisis, discusión, de concreción de tareas desde el
orden de lo local que significa llegar a los 102 pueblos desde el pueblo Wayuu,
hasta el Pueblo Eperara Siapidara, para seguir por los Awa, Tanimukas, cubeos,
curripacos, uwas y yukpas para no mencionar a otros pueblos fronterizos y quienes
sobreviven al interior del país,
al lado de los sectores sociales, y de los colombianos también, para
conocer la realidad de lo vivido
cotidianamente y llegue a las organizaciones regionales, macroregionales y
nacionales para así tener claridad pragmática de tal manera que la Mesa Permanente de
Concertación de los pueblos indígenas así como la Mesa de los Pueblos Indígenas
de la Amazonia pueda encontrarse con la
realidad del despojo, asesinatos colectivos y selectivos, amenazas en el actual
gobierno de la Ley de víctimas y restitución de tierras, quien va hacia
adelante con sus locomotoras por encima de los pueblos indígenas.
Estas tres reformas van a afectar
los derechos humanos fundamentados en la dignidad de la persona humana quienes
la poseemos en calidad de personas y no otorgados por conveniencias políticas,
es un mandato universal y es a partir de allí donde el actual gobierno debe
comenzar los diálogos en el reconocimiento del Goce Efectivo, Real y Concreto
acorde a los mandatos constitucionales sin contaminación de corrupción que hace
inclinar las decisiones de los funcionarios públicos contra el interés general
de los Pueblos Indígenas y de los Colombianos también.
La Mesa Permanente de
Concertación de los Pueblos Indígenas y el Gobierno Colombiano, integrado por
representaciones de las organizaciones nacionales y regionales y miembros de
las macroregiones en donde reposa la dignidad humillada y perseguida, masacrada
y señalada, despojada y engañada, de los Pueblos Indígenas debe elevar su voz
de protesta ante la inacción del estado para el cumplimiento de las
normatividades constitucionales y que hacen parte del bloque de
constitucionalidad, como son los procesos de consulta previa en los planes de
desarrollo departamentales y municipales, sin dejar de recordar que el Plan
Nacional de Desarrollo fue consultado por sentencia judicial, no por voluntad
política, deben suspenderse los procesos de consulta que se están ejecutando a
todo lo largo y ancho del país como meros actos formales y administrativos en
donde no se conocen las realidades de los impactos sociales, económicos y
culturales de las megaobras en el orden minero, agroindustrial e hidrocarburos.
Compañeros la responsabilidad es
de gran envergadura, y es bueno detenerse un poco y bajar a las regiones, a los
pueblos y no debe ser preocupación nuestra si el gobierno tiene o no tiene
recursos, nuestra responsabilidad es con los pueblos indígenas, con las nuevas
generaciones, no podemos permitir la desestructuración cultural aun mas cuando
existen sentencias judiciales que responsabilizan al gobierno de estos hechos,
quien sigue dilatando su cumplimiento en la más pura demagogia.
Armando Valbuena Goauriyu.
Sabio Indígena de la Humanidad
Unesco 2009.
Ex presidente de la ONIC.
E-mail: armandogoauriyu@yahoo.com.mx
No hay comentarios:
Publicar un comentario